viernes, 21 de noviembre de 2008

un campo perdido

Boomp3.com



Cuando uno va al campo al finalizar el otoño, es asi, pastos quemados y la entrada una hilera de àrboles desplumados, solo que el suelo siempre es una alfombra de oro alcolchonado, con hojas de otros colores y humedas, siempre humedas...
Ahora, por estos dias todo se convirtiò en una selva, donde hay lugares que ni pasar se puede, y ni sabes donde pones los pies, porque hasta de pronto encuentras grandes pozos, que debes evitar, hechos por algunos animalitos que algunos coleccionan disecados. De todas formas por estos dias, todo es vida por ahi. Una vida salvaje, que brota natural, sin que nadie pueda hacer nada por mejorarla, pues es incontrolable. Solo las grandes maquinas podrian acabar y prolijarla, pero en ese rincon todavia no han podido entrar las grandes maquinas.
El atardecer es un golpe a la sensatez y al ojo pintandolo todo, desde el cielo, hasta lo que hay en parado sobre la tierra o yace en el suelo, y como que se refractan los colores, haciendo aparecer posibles fantasmas de humo entre esa selva desprolija.
Mas luego todo es oscuro, irreconocible, y hasta un lugar donde perderse aun sabiendo perfectamente orientarse.
Ya no estan los perros, ellos tambien partieron, o sea tampoco hay ese chumbido amigo que te reconoce, solo soledad.
No se que haria mi padre en medio de esa soledad agreste tantos dias y tantas noches. Solo la mañana es ahi alegria.
Quizas lo mismo que yo, pero no lo se.

picamiel
octubre 2008

No hay comentarios:

Publicar un comentario